"Comer sano es caro". Escucho muchísimo esa frase. Y debo decirte que todo depende. A veces si, una ensalada es más cara que una hamburguesa (pero no una hamburguesa de calidad, claro). Y no siempre es así. Tomar coca-cola o alcohol a diario créeme que es mucho más caro que tomar agua filtrada o mineral. Por eso para que no te justifiques con eso acá te dejo algunos tips para que te saqués el chip de que comer saludable es caro, porque vas a ver que si hacés la prueba vas a gastar mucho menos.
En primer lugar me parece importante establecer prioridades. Yo considero que mi salud es algo muy preciado y mi cuerpo también por eso me gusta darle alimentos de calidad, naturales, de la tierra. Yo no dudo en invertir en mi salud, comiendo saludable, haciendo deporte, etc. El sólo hecho de cambiar la perspectiva es clave. Comer saludable no es un gasto, es una inversión que es algo muy diferente! Y sí es una inversión a largo plazo, porque cuidando nuestros hábitos prevenimos muchísimas enfermedades y creeme estar enfermo es mucho más costoso que comer saludable. Aún así te voy a dar mis mejores tips para que no gastes de más innecesariamente y después te frustres en el camino.
Valorá tu salud actual y cuidala que te lo vas a agradecer!
Ahora sí vamos a los 10 TIPS para comer saludable con bajo presupuesto:
1- Ir a los mercados de productores:
Al comprar directamente a los productores, se reducen los intermediarios y conseguimos mejores precios. Además, cuando vamos a este tipo de ferias podemos conocer más sobre el origen de nuestros alimentos. Hoy en día también encontramos esta opción online. Por ejemplo, Jardín Orgánico tiene su web donde pido la fruta y verdura directamente y me llega a casa el mismo día que se cosecha.
2- Priorizar lo estacional:
Si intentás comprar frutillas en invierno, no sólo te van a salir muy caras, sino que además no van a estar tan sabrosas ni van a ser tan nutritivas como en primavera. Chequeá siempre cuál es la fruta y vegetal que está en temporada en el lugar donde te encuentres. No sólo vas a obtener los nutrientes que necesitás para ese clima sino que además vas a aprovecharlas en su mejor momento en cuanto a sabor y precio bajo por su amplia oferta. Una buena idea es comprar los cajones de vegetales y frutas de estación que vienen con un mix ya armado. Generalmente hay de diferentes tamaños para que elijas según el consumo o cantidad de integrantes de tu hogar. Es una buena opción ya que son más baratos y te ayudan a variar, a no comprar siempre lo mismo.
3- Comprar frutos secos, semillas, legumbres y cereales a granel:
Las grandes cadenas de supermercados están incorporando cada vez más alimentos naturales debido a la demanda. Por suerte, día a día hay una mayor consciencia en cuanto a lo que comemos y esto hace que los supermercados y marcas deban adaptarse a lo que pedimos los consumidores. Sin embargo, yo prefiero comprar en almacenes naturales o dietéticas ya que, no sólo es más económico sino que, pienso en los pequeños productores y sé que los supermercados los matan (por así decirlo) con las condiciones de pago, plazos y demás.
Y una nota importante a esto! Empezá de a poco. Tengo amigas que me dicen, fui a la dietética y me gasté una fortuna y no sé qué cocinar. Incorporá un ingrediente nuevo a la vez, probá con algún cereal diferente. Un buen primer paso sería cambiar del arroz blanco de caja y comprar arroz yamani o basmati a granel en la dietética.
4- Organizarse y planificar las comidas:
Seguramente te haya pasado alguna vez (lamentablemente) de tener que tirar/descartar comida porque se te puso fea, o porque se venció o se te formaron gorgojos, o simplemente porque no freezaste a tiempo y pasaron días en la heladera sin cocinarlo. Cuando planificás medianamente las comidas de la semana, las compras son más eficientes, evitás comprar de más o cosas que no vas a necesitar. Podes hacer compras sabiendo lo que vas a necesitar. Cuando no tenés idea qué vas a comer en la semana, te puede pasar de ir al supermercado, verdulería y/o dietética y llegues a tu casa habiendo gastado un montón y sin poder armar las comidas para 1 semana con eso que compraste.
5- Freezar hierbas aromáticas:
Esto es algo que hago muchas veces con el perejil, cilantro, ciboulette. De esta forma evito que se me ponga feo en heladera. Si bien se mantienen varios días en un vasito con agua en la heladera, si veo que se está empezando a marchitar, las pico y guardo en el freezer.
6- Llevar un control de gastos:
Anotar los gastos es clave para ver dónde podés reducir o ajustar. Quizás todos los días te compras unos frutos secos en los chinos, o el almuerzo a la vuelta de la oficina, o un café to-go. Y parece que no pero termina siendo un gasto grande al mes que podés reducir.
7- Comer menos afuera, cocinar más:
Podés preparte varias comidas por el mismo que precio que una comida afuera. Reducí las salidas a comer o el delivery frecuente, los snacks o picoteos en la calle. Si cocinas vos no sólo vas a comer más saludable sino que vas a ahorrarte bastante.
8- Llevar tu botella de agua a todos lados:
Si hay algo que no me falta es mi botella de agua. La llevo a donde sea que vaya. No sólo me recuerda tomar agua sino que además evito tener que comprar botellas por la calle o en el gym. Así que si todavía no tenés una botella, te sugiero que te compres una! No solo le haces un favor a tu bolsillo, también al planeta y tu salud. ¿Necesitas alguna otra razón para comprarte una o usar esa que tenés guardada en algún lado en la cocina?
9- Buscar sustitutos:
Las almendras son caras y como regla general uso máximo 1 taza de almendras en una receta. Si querés hacer una receta que lleva mucha harina de almendras, por ejemplo, podés reemplazar todo o la mitad de lo que lleva por harina de girasol, o maní. Y si te gusta la pasta de almendras, podés probar por esta receta de pasta de girasol, yo la hago siempre y me encanta.
Si vas a invitar a tus amigas a comer, en lugar de recibirlas con queso y papas fritas de paquete, prepará papas o batatas al horno. O bastones de zanahoria, apio, pepino, zuchini con dips o hummus. Si querés preparar taboulé de coliflor procesado como esta receta. Ojo, son sustitutos para recetas pero no quiere decir que nutricionalmente son equivalentes.
Los snacks orgánicos, sin gluten, importados son muy costosos y no son indispensables. Podés prepararte tus propios snacks sin gastar fortunas. No tenés que comprar cada producto trendy, enfocate en lo simple, en lo que tenés a mano y creá.
10- Hacer compras conjuntas:
Tus amigas del trabajo, vecina o cuñada está en la movida saludable como vos? Hacé compras conjuntas. Algunas marcas o productores tienen mínimos muy altos para el consumo de una casa. Por eso podés comprar junto con un par de amigas y así pagar mucho menos. Mi cuñada por ejemplo compra mantequillas de maní junto a sus amigas del barrio o conocidos. Compra a precio mayorista directamente al productor.
Y ahora contame vos ¿qué tip te gustó más? ¿Agregarías algún otro?. Dejá tu comentario o pregunta acá abajo!
mini dice
Gracias Loli excelente tus tips. Ya hice 2 veces la pasta c castañas de cajú al limón y me copo. Excelente para un mediodía q tenía poco para comer. Me encanta ver tus logros. Te confieso q como algunas cosas c gluten. pero el cambio 100% q hicimos no comer procesado, ser consciente y comer lo de estación. Acá, en el sur la fruta y la verdura es más limitada y hay q repetir bastante. Asique busco alternativas todo el tiempo , un beso enorme Mini
Loli Alliati dice
Que bueno Mini!! Amo la pasta al limón!! Super facil y rica! 🙂